Oí la expresión "Baby effect" por primera vez en un capítulo del "Late Show de Marketing Digital" de Joan Boluda. Fue el empresario y emprendedor Víctor Correal quien explicó como afectó a su vida profesional el nacimiento de su hija. Al ser un tema que también ha revolucionado mi vida de emprendedor, quiero explicarte mi punto de vista sobre este curioso efecto.
En el año 2014 ya era emprendedor. De hecho ya hacía casi 10 años desde que fundé mi primera sociedad junto con mi compañero y amigo Miguel Mediavilla. Pero este año fue especialmente importante para mi a todos los niveles. En Abril se produjo un acontecimiento que cambió los cimientos de mi vida. Nació mi hijo Víctor. Es muy difícil describir con palabras qué es lo que significó, significa y significará Víctor para mi. Mucho más allá del amor paternal y la enorme responsabilidad para hacer de él un hombre que pueda valerse por si mismo en este mundo, me hizo replantearme mis objetivos como emprendedor.
Baby effect y conciliación para emprendedores
Los emprendedores sufrimos un nivel de estrés muy alto. Las interminables jornadas laborales nos hacen perder la perspectiva. Fue entonces cuando me hice a mi mismo la siguiente pregunta: cuando Víctor fuera suficientemente mayor, ¿cómo le explicaría a qué me dedico? ¿Cómo justificaría haber elegido el camino del emprendizaje? Tras pensarlo detenidamente, obtuve algunas conclusiones interesantes:
Quiero que mi hijo me vea feliz. No quiero que sienta que mi trabajo me amarga. Necesito que vea que mi trabajo me apasiona. Si haces que tu trabajo te inspire y además lo centras en la honradez, a la larga podrás sentirte feliz y orgulloso. Incluso podrás inspirar a otros.
Esta es la razón por la que soy emprendedor. También es la razón por la que actualmente sólo me involucro en proyectos que puedan marcar la diferencia. Me gusta desarrollar proyectos online que mejoren la vida (personal o profesional) de los usuarios. Más allá del aspecto económico (que también es importante ya que cualquier proyecto online debe ser a la larga sostenible económicamente) hay algo que realmente me inspira: ver cómo cientos de usuarios utilizan diariamente un desarrollo que yo y mis compañeros de equipo hemos desarrollado. Aspiro a que pronto sean miles, decenas de miles... ¿y por que no cientos de miles de usuarios?
Tras los días duros de trabajo, por muy grandes que hayan sido los problemas, al llegar a casa encuentro en mi familia la paz que me motiva a seguir luchando con más fuerza el día siguiente. Éste es el efecto positivo del "Baby effect" que tienes que buscar en tu vida como emprendedor.
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